Alguien comenzó a gritar, un número, creo, pero no recuerdo cual era. Luego otra voz gritó el número ocho y otra más el cero. Casi al mismo tiempo del cero, se escuchó la palabra silla. Alguien más gritó libro al tiempo en que se escuchaba el número once. Luego se escuchaba otra palabra, u otro número, pero éstos se perdían en la lejanía. Alguien cercano gritó motocicleta, y el ruido de un motor de motocicleta se dejó escuchar, junto a los murmullos de sorpresa y espanto de la gente. Así continuaron un rato mas. Ejercicio, quince, zapatos, candil, noventa, seis, abrigo, calendario, doce, grito y un alarido se escuchó de inmediato, provocando otros de menor intensidad entre la gente.
